Sin lugar a dudas Berlín es una bonita ciudad para visitar, pero lo más atractivo de ella y lo que diferencia de otros lugares de Europa es su pasado comunista.  Al este de Europa se pueden ver muchos lugares de esa época, pero muchos de ellos están destruidos o cambiados de lugar, mientras que en la capital de Alemana podemos disfrutar de una sociedad que se extendió hace pocos años.
Para todos aquellos que como yo disfruten de los reductos de esa época aquí os dejo los lugares más memorables que harán vuestra visita a Berlín un momento histórico inolvidable.
​

1- Treptower Park
Las películas americanas nos han vendido a los aliados entrando por la costa de Normandía, pero no debemos olvidar que si no fuese por el ejercito rojo hoy viviríamos a las ordenes del Tercer Reich. 
Desde Stalingrado los ejércitos soviéticos fueron reconquistando Ucrania, Bielorusia, Polonia hasta llegar a Berlín oriental. Fueron ellos los que liberaron Auschwitz. No debemos olvidar tampoco que mientras que muchos de los soldados americanos eran entrenados en suelo estadounidense, los soldados rusos eran campesinos y obreros que ante la matanza que se estaba dando en Europa decidieron entrar en guerra sin la más mínima preparación.
Por todo ello en este parque se rinde homenaje a todos esos jóvenes que desde el este del viejo continente lograron hacer desaparecer a todo el fascismo alemán.
​
Metro: Línea U1. Parada más cercana Schlesisches Tor. Desde aquí hay dos kilómetros a pie hasta el parque.

2- Karl Marx Allee 
Una de las características más diferenciables de las sociedades comunistas eran sus gigantescas construcciones. Para dar cobijo a todos sus camaradas se construyeron miles de edificios en avenidas enormes. Todas eran muy parecidas, pisos pequeños, edificios grises, sin ornamentación y sin diferenciarse unos de otros, en eso se asentaba el comunismo intentar que las diferencias de clases fuesen las menores posibles.
En esta avenida se puede sentir claramente esta idea ya que las viviendas están construidas sobre edificios gigantescos. Pasear entre ellos mientras imaginamos a los miles de obreros construyendo sus casas para una vida mejor y alejada del capitalismo puede ser un gran momento de nuestro viaje a los reductos comunistas.
Inicialmente el nombre para la avenida era Stalin Alle, sin embargo después de la muerte del dictador casi todas las cosas que llevaban su nombre en la URSS fueron cambiadas, en esta ocasión se puso el nombre del filosofo alemán que redacto la obra cumbre de "El manifiesto comunista".
​
​Metro: Línea U5. Parada más cercana Schilingstr.

3- Estatua de Karl Marx
Entre Alexanderplatz y la iglesia de Berlín encontramos una curiosa estatua de Karl Marx y Engels, padres del pensamiento socialista moderno. Casi escondida en una esquina del parque y sin visitas de turistas os podéis hacer una pequeña foto con estos filósofos que tanto cambiaron la mentalidad de generaciones ya extinguidas. 

Metro: Línea U2, U8. Parada más cercana AlexanderPlatz.

4- Cafe Sybille
Hay lugares que por la historia o por la propia sugestión de la mente hacen que pasar un tiempo en ellos se quede grabado para siempre muy dentro de tí. Uno de ellos es esta pequeña y delicada cafetería que se encuentra ubicada en un bajo de la Avenida de Karl Marx. Sentarte a tomar un café mientras miras por la ventada los edificios monstruosos te hace trasladarte a un tiempo donde camaradas soviéticos discutirían de filosofía, política o ciencias. Imagino el perchero lleno de de abrigos gordos, todo el lugar lleno de humo del tabaco y el olor a las tartas caseras y el café recién hecho. 
Quizás para algunos sólo sea un lugar prescindible en su viaje a la capital de Alemania, pero para otros puede significar un bonito recuerdo de una época que aunque en la práctica no funcionó estaba sustentada sobre una teoría casi perfecta.
​
Metro: Línea U5. Parada más cercana Strausberger Platz.

5- Museo de la Stasi
El miedo, el horror y la psicosis que vivió la gente de Berlín oriental nunca la podremos entender aquellos que hemos vivido en un mundo "libre", sin embargo visitar este museo te hace darte cuenta de como una idea de libertad como reclamaba Karl Marx fue usada para construir una terrible dictadura.
Pasear por los pasillos de este edificio fantasmagórico y escuchar las grabaciones de como su jefe intentaba ser cada vez más perverso y autoritario te puede dar una idea de como tuvieron que vivir los ciudadanos de a pie. La locura de persecuciones a la que fueron sometidos y por las cuales no pudieron tener una vida tranquila se ve perfectamente reflejado en los informes que los nueve mil empleados del Ministerio para la Seguridad del Estado tuvieron que escribir después de escuchar a miles de ciudadanos corrientes.
​
Metro: Línea U5. Parada más cercana Magdalenenstr.

6- Checkpoint Charlie
Aunque este no es un lugar propiamente comunista tengo que ponerlo en el artículo porque si querías entrar en la zona soviéticas tenías que cruzar una de los más de ochenta aduanas que había repartida a lo largo del muro. He leído muchos libros de esa época e imaginar las colas en un lugar como este, pensando si podrás cruzar al otro lado o pensar si te van a pillar algún disco ilegal que están metiendo en la zona comunista, te hace darte cuenta de como vivía la gente del bloque soviético.
Hoy en día no es más que una caseta prefabricada, pero por lo menos se puede ver como sería en aquel entonces los lugares como éste.

Metro: Línea U6. Parada más cercana Kochstr.